La venezolana Giselle Bonet derrocha inteligencia, actitud, belleza y clase, virtudes de mujer empoderada y capaz de vencer toda clase de adversidades. Personifica la viva imagen de las féminas triunfadoras de este país; tenaz, incansable y con visión de emprendimiento.
Giselle es natural de Caracas, pero un día se aventuró a dejar su ciudad natal para cambiar su destino en tierras internacionales. En el presente sigue trascendiendo con éxito en el gigante asiático como Directora General de Pinchili, empresa ubicada en China en la ciudad de Guangzhou, estado de Cantón, la 4ta ciudad industrial más importante de este país.
La autora del libro “11 secretos para tener éxito al importar desde China” se cataloga como madre y empresaria que se crece en las crisis, y como buena ciudadana de esta tierra tricolor extraña las cachapas y las tajadas, situación comprensible porque en el Oriente del mundo no se consigue la harina, ni el peculiar queso de mano, tampoco los plátanos.
Sin embargo, siempre aprovecha su paso por Venezuela para degustarlos todos los días. En esta edición compartimos sus anécdotas y logros en su gestión como gerente de una organización exitosa.
Giselle Bonet es una empresaria célebre con espíritu de colaboración
Como empresaria talentosa en China desde hace 12 años, se siente orgullosa de contribuir con otros emprendedores hispanohablantes, y enlazar con proveedores del gigante asiático en el proceso de importaciones mediante la empresa Pinchili, exportadora de China a otros países.
“Apoyo a las empresas y emprendedores en las importaciones de materias primas, maquinarias, y productos terminados desde este país”. Sus logros sirven de inspiración para que los emprendedores no desistan.
La criolla sostiene que siempre está abocada a compartir su historia de lucha y superación para motivar a las mujeres, haciéndoles ver con su experiencia que “sí se puede llegar a cualquier meta en un país tan extraño como China donde empecé desde cero en un negocio liderado por hombres.”
Su primer arribo a China con fines de negocios
Giselle Bonet siempre fue una admiradora de la cultura china, y su primer viaje lo realizó en 2002 por unas vacaciones. Pero fue en 2011 cuando comenzó a emprender por primera vez en el mercado internacional influenciada por la dinámica comercial y empresarial de la nación asiática. La empresaria se sintió atraída por el éxito logrado por personas y empresas que traían mercancías de China, y decidió hacerlo convencida de su capacidad para lograr esta meta.
Lleva más de una década de aprendizaje en el terreno de los negocios y el comercio internacional con los aportes de sus asesores, empleados y clientes con vasta experiencia en materia de importaciones. Confiesa con humildad y respeto que todos ellos “le han enseñado mucho” y aunque no es una profesional en comercio internacional “se siente 100% preparada para este medio”.
Tenacidad en tiempos de pandemia
Al principio, la pandemia condujo a que muchos empresarios latinos se reinventaran y se tomaran el tiempo para repensar la estrategia que les permitiese mantenerse a flote en el mercado, algunos lo lograron otros se quedaron en el camino. Y aunque el planeta se tomó una larga pausa a causa de la pandemia, Giselle siguió en su afán de lograr sus objetivos y alcanzar el éxito internacional.
Bonet fue una de las pocas mujeres latinas que salieron airosas y triunfantes en los negocios, y la exigente cruzada de potenciar el inventario físico de numerosas empresas durante la etapa de distanciamiento social, confinamiento y el trabajo virtual.
Pinchili, el mejor trofeo de Giselle Bonet a nivel profesional
Giselle siempre tuvo en mente la idea de crear su propia empresa, desde muy niña se visualizó como empresaria, pero para forjarse este futuro tuvo que esforzarse y batallar duro para lograrlo “trabajé de secretaria unos años mientras estudiaba en la universidad en las noches y un día, a partir de allí, decidí emprender, primero abrí ‘Pinchili Import’ en Venezuela, luego ‘Pinchili Import LLC’ en USA, y finalmente ‘Pinchili China’ en Hong Kong y China.”
La palabra “Pinchili” es un término mandarín, oriundo de la provincia de Hunun, que significa fortuna y nivel de poder. Esta palabra decretó el éxito de la empresa en territorio chino, de allí que defina cabalmente la marca personal de la famosa agente de compras internacionales.
Aunque añade, con una sonrisa, que de esta forma llamaba cariñosamente a su hija cuando era bebé, por ello también eligió ese nombre para su proyecto de emprendimiento.
En la actualidad Giselle Bonet es propietaria de siete empresas, todas asociadas al área del comercio internacional. Pinchili tiene su sede principal en Guangzhou y se encarga de los servicios logísticos de las importaciones, además se comporta como un aliado comercial para las pequeñas, medianas y grandes empresas.
Éxito en el comercio internacional
La empresaria ha transitado un largo camino en el comercio internacional, tanto a nivel de importaciones como exportaciones. A cargo de su compañía Pinchili ha logrado que emprendedores y firmas consolidadas logren sus objetivos. Sus deseos de emprender por sí misma la llevaron a emigrar para materializar su proyecto de involucrarse por completo en el ramo de las importaciones.
Al principio tuvo que superar muchos obstáculos con valentía y fortaleza, pero a pesar de los traspiés supo levantarse y continuar con sus sueños, al respecto comenta:
“Me encontraba sin trabajo y con deudas, y en mi desesperación de ver cómo producía dinero miré a mi alrededor, muchos importaban de China y les iba bien. Allí empecé a aprender de este negocio, poco a poco me fui apasionando, estudié administración de empresas, no sabía nada de comercio internacional. Comencé estudiando y buscando información de Google, luego contraté asesorías de diferentes profesionales y conformé un equipo en mi empresa que me ha ayudado mucho”.
Para la empresaria caraqueña fue un verdadero reto aterrizar en un país extraño, empezar de cero, ganarse la credibilidad de la gente, adaptarse a otra cultura y superar la barrera del idioma y el cambio de horario. Al respecto también comenta con convicción:
“Hoy en día, tras haber logrado mis sueños en el comercio internacional, lo que me mantiene en pie es poder ayudar a la mayor cantidad de personas a que no les pase lo mismo que a mí en mis inicios, donde tuve tantos tropiezos en mis importaciones desde China, perdí dinero, fui estafada y también como emprendedora muchas veces dudé de mí”.
Su gestión transforma en huella positiva la imagen del migrante venezolano en otros países, sus logros no solo se ven fulgurados en la empresa, sino también en su obra “11 secretos para tener éxito al importar desde China” la cual llegó al número 1 en la categoría de economía y negocios en Amazon USA al 3er día de haberla publicado en la plataforma.
“Sigue adelante… que nada te detenga”
Giselle Bonet refleja amor propio y una íntegra necesidad de incentivar a las mujeres latinas a conquistar su futuro y a emprender en cualquier espacio, en este sentido comenta con determinación: “logré lo que quería y quiero mostrarle a todos que si yo pude establecerme en China siendo una mujer latina con una niña pequeña, cualquiera que sea tu reto tú también lo puedes lograr.”
Le preguntamos sobre la frase que más la define y sin dudarlo contestó: “sigue adelante…que nada te detenga”. Y es de notar por sus acciones y logros comerciales y empresariales que nunca se ha detenido en sus aspiraciones, demostrando que se puede desarrollar la habilidad para los negocios en un país lejano como China.
En la actualidad se perfila como una de las empresarias latinas con mayor éxito en el mundo.
“No ha sido fácil pero a todos los que tienen un sueño de emprender les digo que crean en ellos mismos, tengan paciencia ya que cada día de trabajo es al menos un paso, que se instruyan y aprendan sobre lo que quieren lograr, ya que con mucha constancia y honestidad de seguro lograrán sus sueños, yo lo logré en China siendo mujer latina y sin mucha experiencia en ese momento”.
Con satisfacción nos cuenta que se siente muy feliz en China, a pesar de que el primer año tuvo que enfrentar circunstancias complejas y difíciles, a tal punto que revela que “fue una pesadilla, pero no por China, sino por mí, esto me enseñó al día hoy que todo cambia cuando cambias las manera en la que miras las cosas”. “…No la estaba apreciando cómo se debía, porque hoy estoy feliz y son las mismas calles, la misma gente, la misma comida, el mismo clima, la misma distancia de mis seres queridos que en esos días que sentía que era todo un horror”.
Dos mujeres guerreras y exitosas inspiraron a Giselle a lo largo de su trayectoria “no son famosas pero como yo se hicieron una carrera y una vida estable por sí mismas son 10 años más grandes que yo, cuando empecé ellas ya tenían éxito”. Lo curioso es que se quería ver como ellas, y lo logró, de allí que “es muy importante reflejarse en personas exitosas para lograr las metas”. Afirma Giselle Bonet.
La pasión por aprender me encaminó al éxito
A partir de 2012 tuvo que asumir el riesgo de emprender, pero eso le costó sacrificios como separarse de su familia, amigos y alejarse de su terruño originario para poner a prueba su talento en nuevos escenarios. Una vez en China despertó aún más su pasión por aprender, y en sus propias palabras manifiesta que el aprendizaje es una herramienta esencial para el éxito de los empresarios.
“La pasión por aprender todos los días me encaminó al éxito, y hoy me sirve para ser mejor empresaria y mejor ser humano, junto con la constancia, honestidad y paciencia.”
Bonet es una mujer segura que confía en sí misma y reconoce su potencial para el logro de sus propósitos profesionales en el mercado chino. Tuvo la certeza de que poseía la capacidad de llegar a la cumbre solo “había que trabajar constante y honestamente para ver los resultados”. Entre sus planes está la expansión de Pinchili a otros horizontes.
Como venezolana virtuosa aconseja a los jóvenes a que “no olviden que la información es poder y aprender es un súper poder”, e invita a los debutantes en el mundo del emprendimiento a que se instruyan a diario sobre lo que quieren lograr y el éxito llegará más rápido de lo que se imaginan. Para recibir orientaciones, asesorías y consejos personalizados para sus emprendimientos pueden contactarla a través de sus redes sociales.
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