Para afrontar y tratar una enfermedad como el cáncer de mama, una de las principales causas de muerte en Venezuela es necesario contar con el apoyo de nuestros familiares, amigos y por supuesto, de un equipo multidisciplinario conformado por médicos, enfermeras, camilleros y -por qué no- una mamografista como Johanny Vásquez. Mujer que se ha dedicado no solo a cumplir con su labor en el Instituto de Senología en Aragua (ISENA); sino que además le ofrece a las pacientes ese trato amable, cercano y empático que todos merecemos, en especial si estamos pasando por un proceso de salud como este.
Pero antes de hablar de nuestra mamografista, comencemos con el ISENA. Se trata de un centro público, gratuito, especializado en ofrecer tratamiento a diversas patologías, incluyendo el cáncer de mama, con personal capacitado para las determinadas áreas y con los más novedosos equipos médicos, brindándonos de esta manera una permanencia cómoda y segura en sus instalaciones. Lo encontramos en la ciudad de Maracay, Estado Aragua.
Asimismo, nos ofrece servicios de mamografía, ecografía y estereotaxia. Además en este centro asistencial podemos acudir en caso de que necesitemos cirugías mayores (histerectomía total o parcial, corte congelado), o cirugías menores como biopsia intraoperatorias, incisionales o por trucut. También cuenta con unidades de psiquiatría.
Como indicamos en párrafos anteriores, Johanny Vásquez forma parte del equipo que trabaja en esta institución. Una profesional dedicada a realizar uno de los exámenes más determinantes al momento de dar un diagnóstico, estudio que puede indicar o no si tienes cáncer en alguno de tus senos. Por lo que Johanny trata de brindar siempre lo mejor de sí cada día, siendo su mayor inspiración su familia, su hijo y la vida misma.
Durante sus seis años en ISENA, Johanny nos comenta que lo más difícil es ver a jóvenes recibir el diagnóstico que nadie quiere, el que indica que padeces cáncer. “Puede ser un poco abrumador ver su miedo y sin esperanza, eso te hace darle más valor a la vida”, afirma la mamografista.
No obstante, también agrega que en el ISENA se cuenta con un muy buen ambiente de trabajo, excelentes compañeros, todos llenos de amor, calidad humana y vocación por lo que hacen. Además ha aprendido a manejar equipos nuevos, pero además a ver la Fe inquebrantable de los pacientes. A algunos ha visto recuperarse y a otros perder la batalla.
Johanny se “conecta” con su labor
Más allá de dar las indicaciones previas, realizar y evaluar quizás el resultado de un examen, Johanny Vásquez busca conectarse con el paciente a través de una charla o una simple sonrisa, con el propósito que la persona se sienta cómoda y relajada.
Es que para nuestra especialista todos los pacientes son únicos y especiales, por lo que merecen ese buen trato al igual que cualquier ser humano. Y esa conexión es tal, que al ver que alguna de estas personas se recupera y solo debe asistir al ISENA a controles anuales, es sumamente satisfactorio para ella.
Lo que demuestra ese corazón lleno de nobleza, de empatía que tiene Johanny que finaliza enfatizando que estemos atentos a las señales, nos realicemos el autoexamen y la mamografía, pues cuando se diagnostica a tiempo el cáncer de mama esto puede salvar la vida. “Siempre con fe en Dios”, puntualiza.
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