Aralih Goitia: Experta en arepas “gourmet” orgánicas

Aralih Goitia es oriunda de la “Tierra del Sol Amada”, por su esencia zuliana siempre fue inquieta, soñadora, luchadora, y tenaz para alcanzar sus metas, aunque parecieran imposibles.

Goitia es experta en “arepas orgánicas” y se tituló en la carrera de Administración de Empresas con un máster en recursos humanos en la Universidad José María Vargas en Caracas.

A los 27 años de edad emigró a los Estados Unidos de Norteamérica en búsqueda del sueño americano del que tanto había escuchado, sin la menor idea de que sus raíces venezolanas serían el motor que la llevaría a crear “Cilantro Gourmets”.

La exitosa maracucha puso en marcha su emprendimiento para ofrecer su principal producto: la arepa orgánica, con más de 10 sabores de vegetales y harinas libres de gluten que hacen deleitar hasta el más fino paladar.

Arepas orgánicas perfectas en Houston, Texas, EE.UU

Aún cuando la comunidad venezolana es cada vez mayor en la ciudad de Houston, las arepas no son tan populares. Pero, como toda mujer con la capacidad y valentía para asumir retos, Aralih Goitia se atrevió a introducir esta novedosa idea en el mercado norteamericano.

“Me parecía increíble que mucha gente de otras nacionalidades jamás había escuchado hablar de ellas y mucho menos probarlas, así que quise mostrar una amplia variedad de colores, y sobretodo sabores de lo que sería una perfecta arepa venezolana”.

Para la criolla era de suma importancia crear una arepa de un sabor increíble, pero más importante aún, saludable, por ello incorporó vegetales orgánicos y harinas libres de gluten.

“El mayor desafío fue dar a conocer la arepa, ni en su versión original había escuchado hablar de ella, lo que me impulsó a ofrecer un producto de excelente calidad, hecho con amor y llevando en alto el nombre de Venezuela”.

De esta iniciativa culinaria surgió “Cilantro Gourmets”, un establecimiento que abrió sus puertas en Houston con increíble aceptación dentro de la comunidad, mucho más de lo que la maracaibera esperaba.

Algunos probaban por curiosidad, otros convencidos de que sería un producto fantástico, una manera de incorporar vegetales en la alimentación, divertida, fácil, rápida y sobretodo saludable.

“Buscaba un nombre que me funcionara en inglés y en español, bonito, con color y aroma, mi color favorito es el verde y amo el cilantro aun cuando debo confesar que ninguna de mis arepas tiene cilantro”.

“La vida me ha dado dos valiosas lecciones”

En el camino aprendió dos lecciones en la escuela de la vida… “Primero, debes arriesgar si quieres llegar lejos, y segundo, aunque no sabía ni cómo cocinar un huevo duro, cuando me convertí en mamá descubrí en la cocina mi pasión por la buena gastronomía venezolana”.

Aralih Goitia es una mujer transparente, muy sincera, directa, sin filtros, entusiasta y demasiado optimista, no acepta un “no” por respuesta, perseverante, perfeccionista, atenta a los detalles, las cosas bien hechas, que se vean y huelan rico, amiga al 100%, y cuando ama lo hace con entrega, nada a medias, cree en Dios y sobretodo en la santísima Virgen.

“Mis hijos, son mi mayor fuente de inspiración, mi motor, el espejo donde me miro para cada dia ser mejor, la constancia, y sobre todo disciplina, que los errores son parte del aprendizaje y que el trabajo cuando te apasiona deja de ser trabajo”.

La venezolana camina por la vida ayudando a quien pueda, dando lo mejor de sí, con alegría y siempre optimista. Sigue las enseñanzas de su madre, quien ha sido su mejor ejemplo:

“Mi madre, la mujer más inteligente que he conocido, sabía de todo, siempre con una respuesta asertiva, amigable, trabajadora, trato de parecerme a ella cada día y lo más irónico es que ella no cocinaba”.

Le preguntamos sobre el lugar de Venezuela que alberga en su corazón y el plato que hace delirar sus sentidos, sin preámbulos nos respondió:

“Asado negro, es un plato perfecto con sabores unicos, una mezcla de dulce con salado, colores y aromas exquisito. Mi lugar favorito es la playa el Supi, ubicado en la península de Paraguaná, el paraíso en la tierra”.

“Empezar desde cero marcó mi existencia”

La exitosa emprendedora tuvo que emigrar para ampliar sus horizontes, siempre con el propósito de mejorar su futuro y tener una mejor calidad de vida. Lo más difícil del proyecto fue empezar de cero en un país extranjero, desconocido, y donde se habla un idioma distinto al materno.

“Fue duro haber salido de mi natal Venezuela, donde están mis raíces, la gente que quiero, mis muertos, empezar de cero en otro país, otro idioma, costumbres, ser madre y criar a tus hijos bajo nuevos esquemas dando libertad sin ser libertinaje, que sean personas de bien, responsables, de buen corazón”.

A pesar de los obstáculos a su arribo a los Estados Unidos, sigue fiel a sus proyectos y materializando sus sueños, con constancia y disciplina. Al respecto nos narra una anécdota en torno a sus arepas orgánicas y de provecho.

“Uno de mis clientes más fieles actualmente, se jactaba de decir que era un gordo feliz y que la comida fit era para otros y no para él, después de mucho hablar y convencerlo me compró dos paquetes de arepas, ya que le insistí que debía probar todos los sabores, a regañadientes las pagó y se enamoró, hoy en día sigue siendo un gordo feliz comiendo mis arepas saludables”.

Exhorta a los emprendedores a que luchen por sus sueños, y “siempre recuerden que si se cierran puertas, se abre una ventana, no acepten fácilmente un NO por respuesta, sueñen, inventen, sean creativos, y ¡Vayan por más!”