«Hablo porque soy mujer y la vida me concedió un maravilloso privilegio de haber ejercido la función de psicóloga»
Elisa Jiménez Armas nació en Zaraza el 30 de abril de 1935. Sus padres fueron Mercedes Armas Guzmán y Pedro Jiménez Pérez. Fue una psicóloga social venezolana formada en la Universidad Central de Venezuela en 1965. Luchó por los derechos de las mujeres, lo que la llevó a ser una de las fundadoras de la Asociación Venezolana para una Educación Sexual Alternativa (AVESA). Esto le dio la posibilidad de ser nombrada entre las 20 mujeres Venezolanas del siglo XX. Su trayectoria se extendió hasta latinoamérica y el mundo, promovió y difundió los derechos sexuales y reproductivos como derechos humanos.
La primera en Venezuela que abrió una línea para atender a mujeres
Elisa estudió en el colegio San José de Tarbes estando en su tierra natal. Durante su adolescencia sus padres se mudaron a Caracas e ingresó en el liceo Andrés Bello. Desde muy joven se interesó por los movimientos sociales, incorporándose en la Juventud Comunista y a la Unión de Muchachas Venezolanas, incluso alcanzando el puesto de secretaria en este último.
En 1965 ya era una psicóloga social de la Universidad Central de Venezuela. Para 1966 era parte del Centro de Orientación Familiar (COF), de la Maternidad Concepción Palacios donde fue coordinadora por veinte años. «Se sentía orgullosa, la considero su escuela, el espacio donde gestó su compromiso con la lucha por los derechos de las mujeres y más específicamente los derechos sexuales y reproductivos.» comentó su hija, Mercedes Muñoz, autora de Elisa Jiménez, Una de ellas. De hecho, en 1995 la Licenciada Mercedes Pulido propuso cambiarle el nombre a Centro de Orientación Familiar y Sexual “Elisa Jiménez”, por todos los aportes que esta realizó.
Elisa Jiménez Armas proponía la educación sexual para la mujer, más allá de verla como finalidad reproductiva, apoyaba la decisión de disfrutar del placer sexual, con el derecho a elegir cuándo, cómo y con quién ejecutarlo. Un hecho innovador para su época, conocido actualmente como perspectiva dialógica-concientizadora. Luchó por la despenalización del aborto en Venezuela. Fue también la primera en disponer a las mujeres venezolanas una línea telefónica para atender a víctimas de violaciones, así como enseñar a mujeres, adolescentes, profesoras y docentes universitarias sobre la sexualidad, derechos y apoyo.
Se desenvolvió como docente universitaria en 1976 en la Escuela de Psicología de la Universidad Central, se encargó de las cátedras: Aspectos Socioculturales de la Sexualidad, Psicología Social y Salud, más Educación Sexual y Concientización. Estuvo como coordinadora de las pasantías de los estudiantes de Psicología Social. Este mismo año pudo participar en el un foro sobre el aborto en la misma casa de estudios, donde dio su primer discurso público, donde sus palabras finales fueron:
«Para terminar quiero decir que yo he tomado la palabra, para pedir la palabra para las mujeres. Propongo a la UCV, a la Escuela de Psicología y a la Escuela de Medicina y las escuelas que tienen que ver con los problemas sociales de nuestro país, que les den la palabra a las mujeres. Propongo que se inicie aquí una encuesta pública dirigida a la mujer venezolana, y que de una vez por todas se le dé la oportunidad a la mujer de decir, que piensa ella sobre este problema. No tengo más nada que decir”
Elisa apoyaba la educación en temas femeninos
El 20 de marzo de 1984 fundó la Asociación Venezolana para una Educación Sexual Alternativa (AVESA) Con esto, Elisa Jiménez Armas buscaba tanto luchar por los derechos, ofrecer atención psicosocial y médica, así como educar en el área de la sexualidad. Orientando, asistiendo e investigando, especialmente en las zonas de escasos recursos. La misma AVESA se hizo partícipe en la creación de leyes y lucha por cumplirlas, enfocándose en la erradicación de la violencia contra la mujer, el abuso y la explotación sexual de niños y niñas, promover la equidad de género y consagrar los derechos sexuales y reproductivos. Con más de 22 años, ya han atendido más de 9.086 mujeres, capacitando a personas sin importar su profesión su sexo
Una gran vida que sigue presente en los escenarios de apoyo social de nuestro país e igualdad. El 30 de mayo de 1994, a sus 59 años, Elisa Jiménez Armas se despide del mundo debido a un cáncer.
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